Primer Acto
8:00 pm: Hora de empezar el espectáculo, realicé los preparativos para el primer asesinato de la noche, era consciente de que sería el más fácil, pues nadie me seguiría por el momento. Aunque lo había avisado, nadie se lo tomo como una amenaza real. Mejor para ellos, de ninguna manera hubieran podido impedirlo. Ahora hablemos de la víctima si es que se la puede llamar así. Él se busco lo que sucedió...
Mi objetivo era el actual capitán de la guardia, un hombre que antaño había sido un modelo a seguir para los jóvenes de la época, valiente, noble, y amable en publico y feroz e implacable en la batalla. Salvo al reino de muchos invasores, pero ya no es sino una sombra de lo que un día fue. Suele pasear por la calle con la cabeza alta, sintiéndose superior a los demás, perdió todo el honor ganado en batalla despreciando a sus compañeros, lo cual hará más fácil mi hazaña, le toca hacer la guardia solo.
Me deslice sigilosamente por entre las estrechas callejuelas del reino dirigiéndome al mercado. Había juzgado conveniente alejarme del lugar donde ocurriría el fatal desenlace, y en el mercado estaba asegurada la presencia de testigos. La trampa había sido ardua de preparar, dado que había que calcular su peso exacto de manera que la placa solo pudiera reaccionar con él. Mi ventaja residía en el hecho de que recorrería la calle prevista, dado que formaba parte de su recorrido habitual. Fue demasiado rápido, merecía sufrir más, pero no quedaba otra opción. Fue simple, demasiado basto, pero no había otra opción. No lo vi así que no puedo deciros lo que paso, solo que se cumplió lo prometido, se le halló muerto, con un ladrillo en el cráneo, lo que además servía a otro propósito,había parecido un accidente. Lo cual reduciría la vigilancia de mi siguiente víctima.
En aquel preciso momento sonaron nueve campanadas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario